jueves, 16 de junio de 2011

Tarde descontrolada...

Cada vez que mi madre llega con bolsas negras en la mano, tiemblo. Sé que me espera un momento desagradable. "Estoy ordenando el placard blanco, acá te dejo más cosas tuyas", argumenta. Mil veces le dije que no me traiga nada, que done mi ropa, que si la dejé en su casa es porque no la necesito. Pero no escucha, mi madre nunca escucha y las deja igual. Y ahí estoy yo, en el piso de mi casa, con una bomba a punto de estallar. Porque abrir esas bolsas negras, implica muchas cosas. Un sinfín de sentimientos.

El más importante de ellos, salta a la vista: tengo 128.274 kilos más que cuando usaba eso. Entonces, ya sé de antemano que nada me va a servir. Igual, porque soy masoquista, abro la primera bolsa... y ahí está toda mi ropa talle S que usé hasta hace cinco años. "No lo puedo creer, ¿cómo me entraba esta musculosita?", le grito a Muchacho, que se quiere matar por no haber llegado unos años antes. Pero como sabe que es mejor no avivar el fuego, desliza un mentiroso: "Creciste mi amor, no estás gorda, te cambió el cuerpo". No le creo nada, ni siquiera le presto atención y sigo sacando una daga tras otra.

"Noooo, ¿cómo me ponía este top azul de terciopelo? Era un gato"; ¿En qué momento se usó esta camisa color mostaza con espigas negras?"; "Mirá este pantalón de cuero tipo Shakira, con este no paraba de ganar". Una prenda tras otra merece un comentario. Una tarea que me podría haber llevado cinco minutos, me ocupa dos horas. Era abrir, mirar, donar. Pero no, se convirtió en abrir, mirar, asombrarme, probarme, entristecerme, reírme, volver a entristecerme. ¿Por qué mierda abrí esta bolsa?

La llamo a una amiga que tiene hijas adolescentes. Le digo que se preparen porque les mando una ropa hermosa que ya no me entra ni en un pie. Me pregunta si no quiero quedarme con algo "por las dudas que bajés". Le explico que mi vida útil, mi cuerpo al menos, venció en el 2006, ahora soy un tonel sin forma y con el corazón estrujado. Me vuelvo a probar una camperita, le tengo ganas, me acuerdo que la gasté, era la elegida a diario... "Si bajo cinco kilos ésto me tiene que quedar perfecto", sueño en voz baja. Me miro en el espejo y confirmo que es una misión imposible. La vuelvo a guardar en la bolsa, que las chicas la aprovechen.

Me voy a comprar ropa nueva. Tomo coraje y entro a un probador, aún sabiendo que me voy a tener que topar con una situación que me descontrola: la vendedora. Esta chica que cumple con todos los rituales que me molestan al pie de la letra. Parece que existe una academia de vendedoras que les enseñan tres únicas cosas: a decir negri cada dos segundos; a meterse en la intimidad de un probador ajeno y a mentir. Porque dale, no me podés decir que me queda divino un vestido que me apreta convirtiéndome en un matambre humano.

Vendedora:
A ver negri (corriendo la cortina sin permiso)... Te queda preciosoooooooooooo, es para vos. Justo, justo, justo.

Capitana:
No me queda precioso, me ajusta por todos lados.

Vendedora:
No negri, se usa así. Ayyyyyy ¡qué hermoso!

Capitana:
OK, gracias, ¿me dejás sola?


Y ahí estoy otra vez en la intimidad del probador, siendo engañada como una niña. Porque como bien cuenta Muriel en este video, los espejos tienen algo. Yo me miro dentro de probador y me quiero llevar absolutamente todo. Me siento una diosa, creo que el vestido me queda pintado y termino pagando un precio desorbitante por algo que no lo vale. No importa, allá voy con mi bolsita, esperando una buena ocasión para estrenarlo y romperla. Pero claro, llego a mi casa, me lo pongo y vuelve la calabaza: no me queda como en el probador. El vestido es el mismo, mi cuerpo también, pero por una extraña razón la imagen no es la misma.

Otra vez insulto al cielo por ser tan ilusa. ¿Cómo me dejé engañar así, si siempre me pasa lo mismo? No aprendo la lección y repito la misma frase de siempre: "A los espejos les ponen algo".
Al final, la culpa de todo la tiene mi mamá, si ella no me hubiese traído las bolsas negras, todo esto no pasaba.

21 comentarios:

La viajera ecuatorial dijo...

También les enseñan otra regla:
Si te queda chico,llevalo igual porque cede.
Si te queda grande, llevalo igual porque encoge.

Sumada a la regla nº1: Nada te queda mal, es lo que se usa, el corolario siempre es: LLEVALO IGUAL

Besos

El mecánico de almas dijo...

Bueno, Capi, yo empezaría por no concurrir más a locales donde las vendedoras dicen "negri" y tienen todos esos defectos que mencionas! Porque si encima les haces caso y gastas guita, no hay mucho mas que decir!

La_Go dijo...

O cuando entras ya se te pegan con un ¿TE ayudo en algo? yo aprendi a responder MIRO Y TE AVISO! porq antes me sentia una yegua si le decia eso y ahora no.
Dias atras entre a ver unas carteras y la vendedora me dice AYYYY Q LINDO TU PELOOOO Y QUEEEE LARRRRGGOOO Y TU PEQUEEE TAMBIIIIEENNNN Q HERRRRRMOOOSUUURA!! mi peque me miro y la entendi salimos y me dijo TODO PARA QUE COMPRES MA, QUE PESADA!!!!

Ela dijo...

ey noooo! para mi es al reves!!! en el probador nada me gusta como me queda, pero en casa la cosa cambia. ahi si me gusta. y si no compro algo xq senti que en el probador me quedaba feo llego a casa, me miro en el espejo y siempre pienso lo mismo: seguro que aca me quedaba lindo. ufa!

Mimi dijo...

Yo tenia un pantalon de cebra hace unos 10 años atras con el que robaba mal, aunque tambien cuando me bajaba del auto me gritaban miuauuuu!!! Tengo un amigo que me conocia ya de aquella epoca y que es a su vez el mejor amigo de marido ( el nos presento unos años despues)y le encanta contar, la historia del pantalon de cebra cada vez que nos juntamos! A mi por el contrario no me molesta que ya no me entren esas cosas, solo puedo pensar que bueno que las pude usar. Yo era un reee gato!!! jajaja lo que si me deprime y mucho que un jeans que me compre hace dos años hoy me corte la respiracion y la circulacion! Pero esto es asi si nos gusta el mc donals banquemonos los flota flota!!!
Besote

Anónimo dijo...

ay amiga..... nos pasa a todas! por ahi tengo una maleta con unas 20 prendas que lamentablemente no son de tela stretch, si el cierre no sube pues no sube, no hay manera.... que tortura.... yo las veo pero no me las pruebo, ahi si es verdad que me deprimo.... las mira y se que no me entran y las devuelvo... lo bueno es que mucha de esa ropa esa de verdad pasada de moda, asi que uno puede decir que "me deshago de ella porque igual no me la voy a poner mas nunca, que feo" jajajajaja

Anónimo dijo...

EXCELENTEEEEEEEEEE!! ES TAN VERDADERO
DICEN UNA FRASE: LO QUE ES MODA NO INCOMODA ... ¿?

Anónimo dijo...

EXCELENTEEEEEEEEEE!! ES TAN VERDADERO
DICEN UNA FRASE: LO QUE ES MODA NO INCOMODA ... ¿?

Anónimo dijo...

Que loquillas las mulleres argentinas. Pos se quejan de estar como ballenas, se regodean de tener ropa de alcantarilla y los lugares donde compran parecen ser de una feria callejera de Barranquilla. Bajen de peso! No se dan cuenta que se faltan el respeto ustedes mismas y se lo faltan a sus parejas!
Con todo amor.
Helena

Paola Florio dijo...

Suerte que fue con amor Helena :) Nos mataste!!

Chicos, en todos los locales te dicen negro, desde el más caro al más barato. No tiene que ver con el costo de la mercadería que se vende el local, sino con una educación que le dan a las vendedoras.

El mecanico de Almas dijo...

Mmmmmm. En Akiavara, Portsaid, Como quieres que te quiera, Prunne, Paruolo no creo que te digan "Negri"
Perdon por disentir, pero es así.

Paola Florio dijo...

Tengo zapatos de Paruolo y jeans de Akiabara, en ambos lugares tamb dicen negri, te lo aseguro.

Ceci dijo...

Cuidando mi salud mental, cuando fui madre armé una bolsa con todas las minis recontra cortas que usaba, los vestiditos de "nena buena/gato" que me ponia en los tiempos de novia con mi querido :oP jeje, y se lo mandé a mi hermanita más chica, que es talle XS y le entra todo obvio :(.

Te mando una regla que yo uso cuando entro a un vestidor:
-mirá la imagen del espejo como si fuera la nueva novia de tu ex a la que le vas a criticar TODO lo que se ponga a menos que irrefutablemente le quede DI-VI-NO.
Entonces recien compralo :)

tia elsa dijo...

jaja! Me encanta Muriel, y es asi tal cual, yo creo que es la luz de los probadores lo que hace que te veas mejor. En cuanto a la ropa y los camibos de peso es toda una tragedia, por eso mejor regalarlo y no mirara. Besos tía Elsa.

El Mostro dijo...

Solo paso para darle un abrazo quilmeño.

Besos.

Mariela Torres dijo...

Aquí en Rosario, sin iguales que allá. Y dicen "negri" también, ayyyyy.

Yo por eso llevo a mi amor, con él cerca no hay vendedora que se acerque al probador, yo quiero que él me mire, no la vendedora.

Oscar Wild dijo...

En mi barrio no se discute con el vendedor a menos que quieras terminar en la bolsa negra :-)
taluego

nosotras dijo...

simplemente genial!

Zeithgeist dijo...

y deci q tu amiga no fue lo suficientemente cruel para decirte: deja, donala, si es del anio del pedo y esta fuera de moda. mis hijas no se lo ponen ni atadas.
ENCIMA VIEJA!

xDD

Zeithgeist dijo...

btw, q boluda es esa esa mina del video por dios

carmeloti dijo...

Yo soy española, para más empuje si cabe ANDALUZA, estoy acostumbrada a comentarios despectivos por empleos de vocablos.
He sido pareja de un argentino, que me llamaba cariñosamente "negra", soy rubia..., y no me parece que la mujer argentina sea gorda o compre mal.

Esta situación se da día tras día en la vida de las mujeres de mi generación, porque el paso del tiempo va dejando su firma, y en mi caso los vinos compartidos, las cañas con amor, el jamón del bar de la esquina, y las cenas con amigos.

Podría lucir una S, y ser una super cool, pero me quedo con la que tengo, y una sonrisa pues al fin y al cabo, lo que ahorro en luchuga me lo gasto en vino...